LA RESPUESTA DEL POLLO

He de daros una noticia. Ayer llamaron al timbre de mi casa y cuando abrí la puerta quedé sorprendida, allí “in person” estaba el pollo, triste, abatido… como un guiñapo por no verse comprendido por nadie, nadie absolutamente nadie daba una respuesta precisa, estuvimos charlando, o sea kikireando, y me dio una explicación de lo más normal, sencillamente:

cruzó la carretera para ir a ver a su “polla” (léase novia), pero la encontró que le estaba poniendo “la cresta” (léase cuernos) con otro pollo –ya sabéis aquello de ser más puta que las gallinas-…. Pues además había unos cuantos más esperando su turno…. Pobre pollo, estaba hecho puré, fosfatina…







Así pues no quise alargar su sufrimiento por más tiempo, le retorcí el pescuezo y lo cociné en pepitoria…. Me ha quedado delicioso, riquísimo… si queréis venir a saborearlo estáis invitados. Se admiten vinos, cavas u otras sugerencias.

Saludos.